Isaiah Thomas vuelve a jugar un partido a
los 35 años, después de 710 días de ausencia y tras superar graves lesiones de
cadera.
Con
35 años, arrastrando graves lesiones de cadera y habiendo ganado más de 34
millones de dólares a lo largo de la carrera, muchos jugadores decidirían
retirarse. Isaiah Thomas, sin embargo, ha vuelto a jugar un partido en la NBA.
Fueron los últimos 1:48 minutos del triunfo de los Suns sobre los Sixers, en el
que no llegó a anotar (falló una bandeja), pero a él le supieron a gloria. Era
el regreso del jugador más tenaz de la NBA.
Hay
que serlo para sobrevivir en una Liga de superhombres cuando sólo se mide 1,75
metros. Hay que serlo para pelear por hacerse un hueco desde el puesto 60 del
draft, elegido por los Kings en 2011. Hay que serlo para promediar 17,7 puntos
en 550 partidos en la Liga. Hay que serlo para ser dos veces All Star y estar
en el segundo mejor quinteto de una temporada. Hay que serlo para no perder el
Norte tras pasar por 10 franquicias. Y, sobre todo, hay que serlo para regresar
a los 35 años y después de una grave lesión.
El
base tuvo una dolencia en la cadera que le obligó a abandonar la NBA, aunque no
la idea de volver. Entre la temporada 20-21 y la 21-22 firmó seis contratos de
10 días. Su último partido había sido el 10 de abril de 2022 enfundado en la
camiseta de los Hornets. Desde entonces no había hecho más que pensar en
regresar a la Liga.
Recientemente
disputó cuatro partidos con los Salt Lake City Stars en la G League promediando
unos sensacionales 32,5 puntos. Sirvieron para que los Suns, con los que ya
jugó en 2014, le abrieran las puertas con un nuevo contrato de 10 días. A las
pocas horas de firmarlo, volvía a jugar en la NBA. Habían pasado 710 días desde
la última vez.
"Quiero
jugar unos cuantos años más en la Liga, así que espero que esto sea una preparación para
eso. Estoy listo para causar un impacto todos los
días durante el tiempo que esté aquí. Ya sea que juegue o no, para mí es más grande que poner la pelota en la
canasta", asegura Thomas, cuyos puntos no serán necesarios en los Suns
estando Kevin Durant, Devin Booker y Bradley Beal.
LIDERAR Y PREDICAR CON EL EJEMPLO
"Puedo
liderar, predicar con el ejemplo, ayudar en todo lo que sea posible", dice
el base, que considera que no tiene "nada que demostrar. Sé quién soy y
creo que el mundo sabe lo que aporto. He jugado de la misma manera en todos y
cada uno de los niveles, sin importar las circunstancias, excepto cuando me
lastimé".
Isaiah
ha conseguido el objetivo de volver, pero se desconoce cuánto tiempo
permanecerá. Tiene asumido que está ahí porque Saben Lee, debido a su contrato
dual, no puede jugar más que cuatro partidos de los que restan, aunque él
tratará de quedarse. Su entrenador Frank Vogel reconoce que "Thomas es un
tipo muy querido y respetado en esta Liga y en esta fraternidad de jugadores,
pero veremos dónde está su juego. No sé cuánto jugará para nosotros".
Sea
lo que sea, el base ya ha ganado. Su perseverancia le ha hecho regresar igual
que le hizo disfrutar de una sensacional carrera cuando lo tenía todo en
contra, empezando por su tamaño.
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